Después de haber quedado deslumbrados con el Valle de los Santos, fuimos a pasar la noche a la ciudad de Guingamp, en el precioso Hotel La Demeure, un hotel boutique precioso, lleno de detalles y con habitaciones de otra época.
A la mañana siguiente, después de un exquisito desayuno en la terraza techada del hotel, nos pusimos rumbo a descubrir dos maravillas de ciudades que nos estaban esperando: Guingamp et Pontrieux